Este libro acude a la gran pensadora india, Gayatri Chakravorty Spivak en algunos de los textos más citados ";Puede el subalterno hablar?", ilustrando en su tesis sobre la irrecuperabilidad de la conciencia y de la voz del subalterno (o mejor de su silenciamiento histórico y textual) con el ejemplo de la práctica del sati, esto es, el sacrificio ritual de las viudas hindúes, que se inmolaban en la pira funeral del marido. Esta práctica había sido prohibida en 1929 por la administración colonial, a pesar de que los británicos habían adoptado el principio general de respetar la ley hindú. Spivak arguye que la figura del sati desaparece entre las posiciones que para ella han construido los demás. La viuda está ausente, a pesar de que es objeto de una continua reescritura: del discurso imperial, cuya fantasía y representación del sati es la del hombre blanco que salva a las mujeres de la brutalidad de los nativos y del discurso nacionalista y patriarcal indio, cuya fantasia y representación S O del sati es que son las mujeres las que, libremente, escogen morir.